Frodo hereda un anillo que resulta ser el instrumento de poder que permitiría a Sauron, el Señor Oscuro de Mordor, gobernar la Tierra Media. Y también irónicamente, John Rhys-Davies, el actor que encarnó al enano Gimli, era el miembro más prominente de la Red social del Anillo, con 1 metro 85 cm. Pero si observamos el reparto primordial en su conjunto, Davies era superado por el gran Christopher Lee, que medía casi 2 metros de altura.
Tras este, Tolkien introdujo un pequeño apartado que se titula Nota sobre los archivos de la Comarca, que no apareció hasta la segunda edición de La Comunidad del Anillo, y donde enumera las fuentes que se supone que fueron utilizadas en el momento de redactar el libro (puesto que él pretende dar a entender que su legendarium fue real).
Reparto
¿No son las preciosas facciones de los rostros de Orlando Bloom y Liv Tyler perfectas para los elfos? ¿No ofrece Ian McKellen una de las mejores interpretaciones de su carrera como Gandalf, tanto que aun lo nominaron al Oscar? ¿No tienen Dominic Monaghan y Billy Boyd la guasa y carisma contagiosos de Merry y Pippin?
Y podríamos continuar hasta el infinito, desde la voz rocosa de John Rhys-Davies como Gimli hasta la fragilidad en las expresiones de Ian Holm como Bilbo Bolsón. No obstante, como en cualquier producción cinematográfica, hubo varios abanicos soñados antes de llegar al definitivo. El emprendimiento del que todos desconfiaban, una quimera para muchos, un viaje a ciegas para otros, derivó en una oda a la artesanía del buen cine y en estímulo y acicate para la vanguardia de los efectos visuales.
Su hallazgo desencadenará la furia de Saurón, que va a hacer lo irrealizable por lograrlo. Con la ayuda de sus amigos y de valientes aliados, el joven Frodo emprende un arriesgado viaje con la misión de destruir el anillo. Los resultados cosechados por esta primera entrega fueron tan sensacionales como sus FXs. Mucho más de siete millones de espectadores asistieron a las salas españolas y se colectaron prácticamente 650 millones de euros en todo el globo.
Películas De Acción Y Aventura
Del temor a volar de Sean Bean y la película musical que los Beatles propusieron dirigir a Kubrick, pasando por la estatura mínima para ser elfo o la obsesión literaria de Christopher Lee con la obra de Tolkien, hasta los accidentes en el equipo de rodaje de Orlando Bloom, Liv Tyler o Viggo Mortensen. El joven hobbit Frodo Bolsón hereda un anillo que resulta ser el instrumento de poder absoluto que dejaría a Sauron, el Señor Obscuro de Mordor, gobernar la Tierra Media. Para evitarlo, Frodo y su leal Red social tienen que destruirlo arrojándolo al fuego donde fue forjado. Una de las mayores sagas del siglo XXI, que no te deja parar de ver el largometraje y con unos FXs pasmantes. En la Tierra Media, el Señor Oscuro Saurón creó los Enormes Anillos de Poder, forjados por los herreros Elfos. Tres para los reyes Elfos, siete para los Señores Enanos, y nueve para los Hombres Mortales.
Hay éxitos de la historia del cine que no perdieron ni un ápice de su impacto inicial. Así sucede con \’El señor de los anillos\’, que volvemos a conocer veinte años después con exactamente la misma sensación de desconcierto por sus logradísimos FXs, con exactamente la misma emoción por el trayecto de sus atractivos personajes, con exactamente el mismo amor por el mundo creado en la pantalla mediante las expresiones de Tolkien. Cuando algo se hace tan bien, está destinado a subsistir para siempre. Hay otras historias del mismo modo curiosas sobre cómo se conformó el elenco de \’El señor de los anillos\’.
Es un relato sobre la pérdida de inocencia y el libre albedrío, sobre la lucha por la independencia, el peligro que nace de la codicia y la acumulación de poder sobre una sola persona. En exactamente la misma entrevista, Jackson afirma que no deseaba imponer sus propios mensajes o ideas en la historia, que deseaba sostener todo lo que se encontraba escrito sobre el papel. \’La red social del anillo\’, la primera distribución de la trilogía basada en las novelas de J.R.R. Tolkien, celebra su vigésimo aniversario como la película que nos logró soñar con batallas épicas envueltas en magia y un anillo con la capacidad de dominarlos a todos. Fue exactamente el profesor de espadas que enseñó a pelear a Darth Vader y Luke Skywalker quien diseñó los duelos y batallas que observamos en la trilogía de ‘El señor de los anillos’. Bob Anderson, una historia de historia legendaria de la esgrima, llegó a decir que Viggo Mortensen era “el mejor espadachín” que nunca había entrenado.
Tener productores que creyesen en su visión, no como Harvey Weinstein. El productor de Miramax, que caería en desgracia en tiempos del movimiento #MeToo tras ser acusado de acoso sexual por decenas de mujeres, estuvo a punto de transformarse en entre las primordiales figuras tras \’El señor de los anillos\’. Pero sus demandas incluían reducir el presupuesto estimado de la saga a la mitad —unos 75 millones de dólares— y realizar una película en lugar de dos, que era el plan inicial. ‘La red social del anillo’ fue nominada a 13 Premios Oscar alzándose con 4 estatuillas en las categorías de Mejor Fotografía, Banda Sonora, Maquillaje y Efectos Visuales. Pero lo que varios no recuerdan de aquella edición es que entre las 13 nominaciones fue para Ian McKellen como Mejor Actor de Reparto por su papel como Gandalf, algo poquísimo común para un intérprete en una película de fantasía. Inicialmente, el prólogo que vemos al inicio de la película iba a ser contado por Frodo, e incluso se probó con la voz de Ian McKellen en su papel de Gandalf.
Secretamente, Saurón asimismo forjó un anillo maestro, el Anillo Único, que contiene en sí el poder para esclavizar a toda la Tierra Media. Con el apoyo de un grupo de amigos y de valientes aliados, Frodo emprende un arriesgado viaje con la misión de eliminar el Anillo Único. Pero el Señor Oscuro Sauron, quien creara el Anillo, envía a sus servidores para perseguir al grupo. Si Sauron lograra recobrar el Anillo, sería el final de la Tierra Media.
El actor, que dormía todas las noches con su espada y llegó a ser interrogado por la policía neozelandesa al llevarla públicamente, insistió en utilizar la espada de acero real y no un modelo de aluminio considerablemente más rápido que habían fabricado expresamente a fin de que realizara con más seguridad las acrobacias de Aragorn. Orlando Bloom se rompió una costilla al realizar acrobacias de Legolas, Liv Tyler se cortó el muslo al desenvainar la espada en su enfrentamiento contra los Nazgul y Viggo Mortensen se partió un diente a lo largo del rodaje de una escena de acción. El actor pidió rápidamente que le pegaran la pieza para continuar grabando, pero Peter Jackson prefirió llevarle al dentista y, poco tiempo después de que le reconstruyeran el diente, volvía a estar rodando. El ámbito de Hobbiton se construyó un año antes del comienzo del rodaje a fin de que toda la vegetación floreciera a tiempo.
La pareja real formada por Ethan Hawke y Uma Thurman podrían haber formado parte del elenco en los papeles de Faramir y Arwen. Liam Neeson podría ser Boromir y haber cedido al poder del anillo único. El principal responsable fue el directivo Peter Jackson, que luchó a lo largo de años por llevar su visión de la Tierra Media a la enorme pantalla, sorteando a esos productores que desearon minimizarla y exhibiendo una fe incorruptible en los resultados que traería un rodaje de dieciséis meses en Novedosa Zelanda. La primera distribución colectó casi 900 millones de dólares americanos en el mundo entero y sentó las bases para una red social fan que no ha dejado de suspirar por las aventuras de Frodo y compañía ya hace dos décadas. Junto con el estreno de \’Harry Potter y la piedra filosofal\’ también en el último mes del año de 2001, \’El señor de los anillos\’ marcó la siguiente temporada del género fabuloso en Hollywood.